Louis Essen realiza la construcción el primer reloj atómico exacto, el cual basaba su funcionamiento en las transiciones de átomos de Cesio-133. Este funcionamiento se da, por la absorción de la radiación magnética que es generada por un oscilador de microondas. Todos los relojes atómicos tienen similar funcionamiento, solo varía la sustancia utilizada para absorber la radiación magnética. Estos relojes son usados para la generación de frecuencias estándar. Por eso se instalan en transmisores Alfa de navegación, navegación de largo alcance (LORAN-C), en sitios de señales de tiempo, en estaciones de radio de onda larga y corta ya que permiten generar una frecuencia muy precisa.