El 20 de marzo de 1800, el físico italiano Alessandro Volta presenta ante la Royal Society de Londres la batería eléctrica, la cual consistía en alternar discos de cobre y zinc unidos con trozos de piel y mojados con agua salada. Ya en el año 1775, Volta en sus estudios de la electricidad, había inventado un artefacto para generar electricidad estática el cual se conoció como electróforo. En 1778 identifica y logra aislar el gas metano. Entre los años 1796 y 1797 utilizando el electroscopio y un condensador, comprobó la existencia de cierto desequilibrio eléctrico, el cual denominó tensión entre dos metales. Luego de este descubrimiento, se concentró en demostrar las propiedades que le llevaron a construir la primera pila eléctrica.
Este descubrimiento de la pila voltaica, fue crucial para la historia de la electricidad, ya que se considera la precursora de las baterías modernas. Con esta pila, se logró por vez primera mantener un flujo constante de electricidad y también se podía reforzar la corriente al añadir una mayor cantidad de discos de plata o zinc a la pila y a su vez reducirlo al disminuir la cantidad de estos. Luego de haber realizado el anuncio ante la Royal Society de Londres, los más destacados miembros de la misma reprodujeron el experimento de Volta y pudieron comprobar el éxito del mismo.